viernes, 12 de agosto de 2011

Una mirada. Cuento.


                
                De nuevo aquel hombre fue y vino por el barrio sin hallar en su paisaje un solo recuerdo que recuerde  o un rasgo convocador de su memoria. Y en esa última tarde del otoño bromeó que su caminata no detendría los planetas del espacio ni a los autos que apuraban la calle; ajenas realidades.   
         
                Por ahí vivía Maritza que cargaba un apellido eslavo de varias consonantes, estudiaba astronomía  y le brillarían algo más sus ojos claros al culminarse juntos. adheridos y siendo ‘más nosotros’. Los dos eran cercanos a los treinta años  y convivían ese regocijo de ser un cuerpo sólo. Unidos en la cúspide y en el silencio de la ternura; y forzar hacia la memoria ese aliento a homenaje es idea improbable, se dijo el hombre que tras tantos años retornara a su origen tan cambiado.

                 Tal vez el ayer es una sombra astuta, un recuento de sumergida lluvia o incierto fotograma que  no lleva a destino. Y así ni es retornable el gesto de silencio con que Maritza le abriría la puerta y sus padres fingían ser ajenos al encuentro. ¿Siempre él saldría cauteloso a la calle al amanecer o los vecinos lo  cruzarían ya bien crecido el día? Sin ambages, recuperar caricias  o la furtiva voz de una mujer que amamos es intención perdida; el pasado se nutre de tiempo congelado.

-     Espero que tus viejos no llamen a la puerta.  
-         Ellos duermen arriba y yo en planta baja, nos respetamos y además mis viejos nos envidian. – se habrían reìdo contenidos en un abrazo.     

              Rescatar amoríos es para dioses antiguos y no obra de comunes, se reiteró por aquel ámbito de jardines desaparecidos y que él apreciara en algún amanecer de ir por su auto estacionado cerca. No pocas veces habrá comprado un diario en el camino de luego repasar en el desayuno sin apuro, demorando llegar muy temprano a la financiera de su padre. Toda añoranza se supone más amable que un recuerdo, pero sin escarbar en presunciones huecas, existir hade ser saberse de algún ámbito, reconocerse dentro de él y recordarse. Por eso cada tenaz olvido nos desgaja; nos hace menos en tanto toda especie, acaso, ha de saberse y recordarse dentro de ella. Más otros acertijos que recordara haber hablado con Maritza…

              En una ráfaga vio y revivió las cerámicas que exhibían un gato atigrado jugando con un ovillo de lana y reconoció esa pared que alguna vez lo inquietara a detenerse y a recordarse él mismo. Una secuencia que quizá aconteciera la misma noche que al llegar nomás le dijo a Maritza que se iría. .  
-         ¿Estás enfermo?
-         No, mi viejo está muy grave.  
-         Avisame como anda todo – y prometieron verse por más que en esa misma tarde con su padre, - un incurable enfermo final-  y su abogado juntaron los papeles financieros que él se llevaría de Buenos Aires a Europa. ‘No a un país cualquiera  sino a todos’, se decía como cínica pretensión de preservarse del íntimo  debate. Así que sumar su vida al quebranto de la especie sería llenarse de una moral barata y devaluada de la que tanto discurseara Maritza entre un momento y otro. Le dolían las ideas y agradeció al diarero que lo animara con un gesto.  

            - ¿Usted busca el chalet de los polacos? Era en la cuadra donde  hay dos edificios. A esa gente yo la recuerdo bien, era muy buena. La hija estaba buenísima, una rubiecita hermosa – y ahí el tipo cambió el discurso a un chamuyo firme, sin rodeo, de mirarle los ojos bien de frente al hablarle-. Pero usted sabe señor- y endureció la voz- un hijo de mil puta que nunca falta los estafó que perdieron la casa y debieron irse lejos – retuvo la mirada y al callarse entró en los ademanes de reordenar su quiosco de diarios y revistas. (Agos.011).
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Eduardo Pésico nació en Banfield y vive en Lanús, Buenos Aires, Argentina.

martes, 19 de julio de 2011

De la Ciencia a la Ideología hay Crisis de diferencia. Opinión.


Nadie puede esperar una digestión suave del denominado subprime español. Entre 1998 y 2008 se iniciaron 5,5 millones de viviendas en España, muchas más de las necesarias. El parque especulativo es enorme y hoy se dice que existen entre 700.000 viviendas nuevas sin vender (según Fomento) y 800.000, según el servicio de estudios de Catalunya Caixa. Hubo años en los que España construía más casas que en Reino Unido, Francia, Italia y Alemania juntas y hoy toca pagar la factura.   
        Esto dice el diario El País de España el lunes 18 de julio del 2011, y ese informe del difundido medio  advierte del preocupante clima no sólo de España; donde el paro laboral es oficialmente del 21%; sino de todos los países de la región que dentro de esa misma concepción económica fijada por los bancos para colocar en deudas hipotecarias sus excedentes financieros, avanzó hacia una crisis global desde al menos hace dos años. El recurso de invertir el dinero propio comprando deudas de bienes reales durante década ha sido un buen negocio, durable en seguridad hasta que algunos tomadores  dejan de pagar y el cálculo matemático de recuperación del lo prestado se va al descenso. O más o menos así a veces es el final.       
         Pero en este caso ese desenlace era previsible ya en el año 2008 cuando Alan Greenspan, que presidiera la Reserva Federal en Estados Unidos hasta el 2006,  admitiera su error al no controlar mejor el mercado financiero y que esa desregulación traería daños irreparables en la economía mundial si no era conjurada a tiempo. Una confesión también fuera de tiempo porque ya la realidad no esperaría y por entonces empezaba a ser impiadosa por los millones de recuperaciones impagas y colocaciones ya muy riesgosas dentro de un clima cada vez  menos previsible.  La estampida En los Estados Unidos no fue inmediata pero derivó en una suba notoria en la tasa de descuento de la Reserva Federal,  - del tres al cinco por ciento y primera alarma del sistema- y siguió con un inesperado aumento del combustible que afecta al norteamericano medio mucho más que a nadie en el mundo. Igualmente por entonces pocos inversores aceptaban  la cercanía de una crisis más seria y profunda, pero la perversión casi suicida de sostener los niveles de ocupación en USA instó más todavía a desmadre de aquella ‘burbuja financiera’ de hipotecas incobrables. Con el mismo estilo de reiterar explicaciones confusas o similares a las que hoy se imitan en los países de Europa, aquello sorprendió a muchos recién llegados al juego y en algún caso como sucede actualmente en Italia a enfrentarse a una realidad que no perdona. Toda esta representación se repite; a pesar de las demoras en aceptarla y el entramado de los grandes bancos de inversión complicados en la maniobra de ocultamiento es una película que también hemos visto en la Argentina alguna vez. Por ejemplo cuando el entonces gobierno de los radicales ‘acorraló’ los depósitos bancarios en el año 2001 y existen todavía muchos recursos de amparo judicial de los ahorristas sin recuperar su dinero.  Y eso sí, tanto aquello en Argentina como esto actual  en Europa opera en defensa de las entidades financieras que actúan en el planeta sin ningún riesgo posible de perder dinero; ‘eso y por profundas convicciones, jamás’.  
      Ante otros síntomas pero con la misma dolencia, hoy es bien sabido que cualquier salvataje financiero es inaplicable, teórico, y cada medida acaba en una distracción transitoria ante la dureza de cada cifra cotidiana, que en estos día y en España informa de una actividad económica en receso y el aumento del paro laboral. Por lo demás se presiente que la aplicación de seguros al desempleo sería poco sostenible ni siquiera a corto plazo, no solamente en España sino en el resto del panorama europeo que tiende a extenderse, y todo acontece a pesar de los desgastes oratorios entre los políticos que en cada país involucrado se culpan más menos deportivamente entre ellos; y hasta la renuncia pedida en España al presidente Rodríguez Zapatero ya sugiere haberse hecho sin mala intención, digamos….
       Los feroces reflejos del malestar económico en Europa y las dificultades que soportaría USA de no ampliar su plafón o alcance del propio  endeudamiento que les evitaría entrar en cesación de pago; algo impensable hace muy poco; por ejemplo ya mismo habilitaría a debatir con seriedad algo sustancial a la supervivencia de todos. Digamos que al menos y sin pretender una extensa fundamentación estructural sería bueno,  inteligente y saludable que se precisaran mejor los términos de aquello  considerado Ciencia Económica. Es la misma con sus doctorados y profesionales en actividad reconocidos por el Sistema Económico, una Ciencia, o si más que una ciencia con todo el rigor técnico de pruebas y contrapruebas, no sería más sensato dejar de calificarla como tal ya que más sencillamente, se trata de una Ideología nutrida de cualquier pastiche teórico incierto en su resultado, pero bien apropiado y certero en perjudicar a los de abajo. Este malentendido sería muy saludable aclararlo ya mismo,  así todos sabemos mejor en qué consiste el juego. Digamos. (julio 2011).
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lunes, 4 de julio de 2011

Fuerte, abajo y lejos de Michel Foucault. Cuento.

     Cualquiera que atajara la pelota que a Jorgito Chopin le sacudieron aquel sábado en San Isidro, no hablaría de otra cosa. Pero en el vestuario él solamente acarició sonriendo los guantes color rosa que protegían sus dedos de pianista y no dijo ni media palabra… .
    El partido contra esos locales de dientes apretados con gente siguiendo el juego en cuatro escalones de un costado, a los Once Corazones no los entretuvo. A pesar del bienhechor sol de octubre y tantas minas vistosas alrededor, - sin atender a los pibes que los insultaban- ellos como siempre salieron a jugar prolijo y sin revolear la pelota a cualquier parte. Y de inicio nomás chocaron con unos atletas con camisetas de rugby y pierna  fuerte que protestaban todo, así que el plan de juego fue no discutir con nadie y bien protegidos atrás, el Nene y Cacho de punta ya tendrían su contragolpe. Pero el ambiente se iría calentando; jugadores, socios y familiares del San Isidro le reclamaban al referí un reglamento propio, el ‘¿qué cobrás hijo de puta?’ a él y sus líneas los hacían tres temerosos personajes, en tanto a los Once los irían identificando como ‘negro de mierda’ o ‘judío asqueroso’.  Y  al habilidoso narigón Aguilera una señora, - buenísima y embutida en un conjunto deportivo blanco- le aconsejó ‘zurdo putito, no te hagas el vivo que te hacemos desaparecer’.  
       Con poco juego y menos palabras se fueron al descanso empatados en cero,  y por la mitad del segundo tiempo el Nene embocó un derechazo de unos veinte metros y un golazo que casi ni gritaron. Entonces sin gran despliegue se irían retrasando buscando que la bola anduviera lejos de Jorgito Chopin y fuera pasando el tiempo. Once Corazones tenía muy ejercitado ese libreto y sacarlos de eso le era difícil a cualquiera, así que sin grito ni exhibición porque la hinchada íntegra local ya les puteaba la tercera generación, llegando el final uno a cero el referí agregó dos minutos de descuento. Que luego de transcurrir y volver a mirar su reloj, unos tipos de pelo corto entraron al campo y chau con la elegancia y el ‘fair play’; uno de bigote le recordó  al referí cierto reglamento no inglés ‘vos de aquí no salís, la puta que te parió’, otro le manoseó el cuello y reglamentariamente, el partido prosiguió dos minutos más.
       Así que seguirían centros desprolijos al área de Once Corazones,  despejes ya sin orden para salir jugando y llegó por ahí una bola  inocente, y penal a favor de San Isidro  cometido por el hombre invisible. Fervoroso griterío de aprobación y en segunda escena Jorgito Chopin ajustando sus guantes rosas y los Once Corazones mirándose en silencio. El petiso número seis de San Isidro alisó con la pelota el pastito  exigiendo ‘que no se adelante el arquero’, el referí cerca de Jorgito le gritó ‘usted no se mueva de la línea’ y algo menos estridente antes de la ejecución. Jorgito se hamacó en un reflejo, el zurdo retacón con tres pasos de carrera sacudió un disparo seco abajo a la izquierda y la bola hizo ‘chaf’ contra los guantes rosas de Chopin. Además de irrepetible, una atajada espectacular  que al desplomar un silencio metálico en el entorno ni advirtió que Jorgito sin ostentar ni mostrando la pelota sacó rápido para el Nene, solo allá adelante, y ya sin querer más el referí heroico  pitó el final. Lo mismo jugadores y público del local, perdiendo entusiasmo,  lo manosearon y putearon hasta el vestuario pero el hombre sobrevivió.
       El penal que atajó Jorgito Chopin debió ser el comentario pero enseguida la tarea fue ducharse para irse lo antes posible. El arquero apenas se sonrió consigo mismo ante sus  ‘guantes mágicos color rosa’ y recién comentó el asunto en el tren de vuelta con el Quelo Varela, el vendedor de libros.
- Ese referí resultó un turro de no creer. El tipo sabía como pateaba el petiso y me gritó ‘no se mueva de la línea’, y entre dientes ‘abajo, a tu izquierda’.
- Es increíble; esa fue una demostración de Poder con mayúscula,
- … y qué lástima Quelo no preguntarle ahí mismo si era un lector de tu amigo Foucault - y se cagaron de risa.
Eduardo Pérsico nació en Banfield y vive en Lanús, Buenos Aires,

Una instancia donde la realidad retorna a ser la verdad. Opinión.

  Una instancia donde la realidad retorna a ser la verdad.
                                                   
                   y una puesta en hora de aquello sustancial de la humanidad pidiendo que comamos todos                      

               Cualquier palabra gana, pierde, se envilece o jerarquiza según cómo y donde se pronuncie, en cuanto ese término ha sido el valor más integrador de la especie. De la manada en adelante incluyendo sus separaciones, luchas y postergaciones, la palabra enlaza lo reciente con lo ya adquirido por el individuo y si ese signo se malversa o traiciona el daño perjudica íntegramente al grupo o especie, y por lo mismo vale tanto desde qué Poder se dicen las ‘verdades. La historia íntegra es ya un ejemplo y no de casualidad el Napoleón Bonaparte por ahí advirtió que ‘un Idioma era un Dialecto con un ejército detrás’. Esa fuerza suficiente para  construir el pensamiento colectivo es notoria: el uso del castellano entre nosotros en desmedro de las lenguas nativas resumiría con qué palabras y desde dónde el Poder logra malversar cada historia.  
                      Hoy mismo y cuando los engendros económicos de los centros mas importantes del Poder por atenuarle al capitalismo financiero el cenagoso terreno por donde ambulan la  producción y consumo, -madre de todas las batallas- Grecia, España y otros deben desechar ‘los activos tóxicos del sistema’, antes llamadas Deudas, y los ya actuales y venideros Desocupados son ‘candidatos a percibir un seguro social’ que aunque jamás logren percibirlo, resuena menos doloroso. Asimismo y usando sus propios recursos idiomáticos los grandes medios de la información universal suelen contarnos que los muertos por los ‘bombardeos erróneos‘ son apenas ‘daños colaterales no deseados’, y así también le ordenan al mundo que cualquier entredicho entre ‘buenos y malos’ se falsea y extrapola a voluntad. A saber y en estos días, la detención por violador del máximo funcionario del FMI Strauss Kahn, - que alguna vez no coincidiera con el concilio de Washington- la pronta asunción en su lugar de la francesa Christine Lagarde y el ingreso a escena de otra mujer reclamando justicia por un ataque similar de Kahn hace diez años, son un buen ejemplo. Desde lo espectacular y para semanarios ‘del corazón, este enredo resultó  atractivo y suficiente para excluir los intereses económicos y políticos que se movieran tras semejante cambio en el FMI en instancias tan complejas en varios  países de Europa. El asuntito no altera que ante las órdenes superiores cualquier acusación, cierta o fraguada, no es un descubrimiento contemporáneo y no existe lugar del mapa donde la realidad más  incuestionable no sea desdibujada de algún modo. Hasta ahí los desacuerdos y las certezas, pero actualmente acontece un período histórico de creciente movilidad social donde también las grandes multitudes desechan esa impune manipulación. Acaso sea una puesta en hora de ciertos  aspectos sustanciales de la humanidad pidiendo que comamos todos, bien puede ser, pero a eso se le agrega una activa reclamación popular y una dinámica en sus manifestaciones inesperada por las grandes corporaciones y socios menores. La gente en la calle que mucho pero mucho preocupa al Poder, hoy discute desde la instrumentación de los paraísos del capitalismo a los verdaderos cimientos de su ideología. No son todos reclamos menores con sentadas de alguna plaza ni en la exhibición de los indignados en la Puerta del Sol, y ante ese fenómeno caen en desgracia ciertas usinas de la opinión interesada, maniquea o calumniadora. La movilidad de las multitudes que tiende a permanecer se irá agudizando si la cuestión de la subsistencia económica se acrecienta y con más o menos  matices todas cuestionan con tanta dureza a los medios de comunicación que sin duda, le restan cada día más predominio y credibilidad sobre la sociedad. Y de paso nos anoticia a todos que la vieja convicción de aceptar sin relectura toda especie publicada, ya fugó del inconsciente colectivo y mucho antes de lo pensado por el mismo Poder.  
    Y sobre la veterana credulidad me permito recontar algo escuchado al poeta Cátulo Castillo: en una peluquería de Buenos Aires discutían con fervor si era cierto que un español llamado Baigorri Velar había traído a la Argentina una máquina que hacía llover donde fuera. Sería por los años treinta, y el joven ayudante del peluquero le gritó a Castillo que no lo creía ‘che Catulín, ¿cómo eso puede ser mentira si está escrito encima del diario? Esa vez, risas aparte se acabó del debate, pero ya crecida la convicción de que no existe medio informativo sin manipulación ideológica eso implica un avance sustancial en las relaciones no solamente de poder sino las inherentes a lo cotidiano. Ese novedoso bagaje de percepción crítica de lectores y televidentes en todos los niveles empieza a exigir, - sin éxito ya ni en lo inmediato, por supuesto- que los medios en general y no solamente corporativos deberán mejorar la objetividad hoy ausente en cualquier enfoque.  Asunto que sucederá por la imposición de una realidad que pese a sonar como un confortable lugar común, es la única verdad. Aunque las corporaciones del Poder se resistan a pura falacia discursiva. (7/2011).
Eduardo Pérsico nació en Banfield y vive en Lanús, Buenos Aires, Argentina.  

domingo, 12 de junio de 2011

Viaje a las estrellas. Brulote.

En marzo se cumplió otro aniversario del anuncio del entonces presidente de Argentina, Carlos Saúl Menem. Y ahí, en la pobre puna jujeña prometió a los alumnos viajes interestelares con naves que despegarían 'de Córdoba, cruzarían la atmósfera y desde la estratósfera llegarían a Japón. Hoy, 10 de junio del 2011 se lanzó desde California un satélite espacial metoerológico construido por científicos argentinos en el país.  E.P. 
 
VIAJE A LAS ESTRELLAS.
Me permito molestarlo mi buen amigo José,
pues quiero invitarlo a usté a compartir la emoción
de ir a conocer Plutón en una nave de aquellas,
que atraviesa las estrellas, la atmósfera y el Japón.

Yo ya elegí ventanilla en sector de no fumar.
Total, ¿qué puede pasar si en una horita llegamos?
Desde Córdoba zarpamos y ahí nomás, a disfrutar.

Por un asunto de anillos a Saturno hay que ir casados;
a Mercurio los pesados; a Venus van sólo minas.
¿Quiere bajarse en la esquina? Toca un timbre y lo dejamos.

A la Luna es sin escalas, en Marte amartizan todos.
No olvide su sobretodo porque puede refrescar
y si piensa caminar lleve zancos para el lodo.

En Neptuno hay buen rebusque para bañarse barato.
Si quiere pasar buen rato, Júpiter nos queda al toque:
¡ no sabe qué despelote, todas las minas son 'gato'!

Si hay fin de semana largo viajaremos hasta Urano.
Es un sitio muy lejano, debemos hacernos cargo;
más podemos visitarlo, fleta un charter “El Riojano”.

Hay otra excursión más breve que pronto saldrá del Bajo,
desviando por atajos cruzará Constitución,
Vieytes, Moyano y el Borda: nos iremos al carajo...

Europa, los indignados y cierta actualización. Opinión.

.. España  anunció el 10  de junio 2011 el permiso a realizar despidos en empresas con dificultades que lo requieran,  que en una sociedad aún pudiente  puede acelerar el  desequilibrio, … y la reducción  del gasto público, igual que hoy en Grecia  y hace años en Argentina golpeará primero al sector de más abajo    


                Hoy y siempre, parecernos o ser idénticos es complejo: la globalización siglo veintiuno viene aliada con multimedios, Internet y computación y si esas herramientas las usamos sin verlas como ‘instrumentos del enemigo’ puede servir al interés de la comarca. Sin alejarnos, la crisis económica año 2011 en Europa es textual de la nuestra en el 2001, con el gentío en la calle reclamando a los gobernantes ‘que se vayan todos’, algo que hoy los europeos no suponen un antecedente para ellos. Al vivir en otro continente tal vez ignoren  lo aprendido en América Latina con los feroces planes de ajuste, y por creer esa experiencia  ‘ajena a nuestra identidad’ según algunos políticos y economistas de Europa piensan no de modo peyorativo pero sí negando la coincidencia de cierta situación No todo es comparable pero estimar la enseñanza de una crisis ajena a la forma cultural de los europeos, sin bucear mucho oculta cierta incomodidad poca certeza el concepto si hablamos de la eterna necesidad de comer en España, China o en el sitio del planeta que uno elija. Un desajuste de enfoque  que se aumenta al agregarle una tesis voluntarista sobre la identidad, -entidad que acosada por el hambre no es ni una dudosa entelequia- y pretendiendo ‘oficializar’ que el hambre acciona distinto en alguien vestido con moderna y costosa ropa deportiva que en un mortal que la sufre sin ropa. Por decir correctamente.  
             En esto vale interpretar la actitud en países donde consideran al bienestar creciente de sus habitantes no como aciertos del régimen liberal financiero; - pese a la anterior señal de peligro por las hipotecas fallidas en USA y los últimos rumores de un default cercano- sino por las ventajas políticas y culturales que ostentan sus pueblos sobre los demás; en este caso, latinoamericanos. Una certidumbre que merece una revisión ante la actual crisis no exclusiva de Grecia, - que califica su propio gobierno de ‘una cruel encrucijada’ por tratarse hoy del  país más desvalido- sino también por el pesimismo de los números en España cuando los ‘indignados’ no se repliegan y la derecha que suplantará al tibio socialismo del gobierno,  profundizará la receta de ajuste con reducción del gasto público exigido por los organismos de crédito. Asunto que aún pendiente el nuevo titular del FMI, disputa que agregó a Brasil, Rusia, China y lndia, países emergentes que exigen peso en las decisiones, tiene sus programas locales donde en España se anunció el 10  de junio 2011 el permiso a realizar despidos en empresas con dificultades que lo requieran, y que en una sociedad aún tan pudiente como la española podría acelerar del desequilibrio. Que junto a la obligada reducción  del gasto público, igual que hoy en Grecia o Islandia y hace años en Argentina, golpea antes a los de abajo.
        En la instancia política mundial y en el tejido social que  elijamos, hay tensiones quizá inéditas que sin estruendo, condicionan el futuro cualquiera sea. Y pese a que esa inquietud latente se ignora o malversa en las corporaciones de comunicación, el futuro no termina si mañana la gente deja las calles y las plazas  donde no pocos se indignan sólo el fin de semana, porque la movida acciona en lo profundo de  su propia exhibición y  casi imperceptible apunta más allá de sí misma. Hay en eso un potencial transformador que las corporaciones informativas disimulan en una demostración de su fuerza propia. Una fuerza que pretendieron desplegar sin mayor éxito en unas excursiones sudamericanas de la Sociedad Interamericana de Prensa; conspicuos dueños de diarios y televisoras que en su tarea de condicionar gobiernos reclamando una libertad de expresión que ellos no practican, al menos en Buenos Aires no hicieron muy buen papel. No confesaron la mengua que sus medios consiguen hoy sobre la voluntad general pero en eso anduvieron. Y un ejemplo inmediato a eso resultó la ignorancia de la prensa en la elección del nativista Ollanta Humala como nuevo presidente de Perú, un político sin apoyo mediático de ningún tipo que ganó y pasó a integrar el cuadro dirigencial sudamericano, que sumado es una molestia del  Poder en la región. Una molestia mostrada durante la campaña por la descalificación de la prensa a Ollanta Humala, y un fracaso de la corporación mediática al demostrar la pérdida de influencia en la opinión mayoritaria en América Latina; un retroceso que ya no es exclusivo de los diarios Clarín y La Nación en Argentina. El descrédito de esa opinión dirigida hasta en con dosis de perversión se muestra más o menos diluido en los distintos países, es indudable, aunque ese lastre sobre el pensamiento impuesto por los medios masivos pesa mucho aún en los países europeos. Acaso y bien podría ser porque la adscripción de ellos al Poder sea dosificada con mayor elegancia y los lectores los estiman como diarios cautivos pero con los preceptos  de los ’70. En Europa no es tan lejano Francis Fukuyama, su fin de la historia y otros cielos prometidos; aunque la gente  en la calle o donde sea  desoyendo  ‘la voz del amo’, ya significa mucho contra los fabricantes de opinión y pensamiento. Y sin ahogos de fervor ni  exaltación personalista, las manifestaciones diferentes, - y aquí vale la identidad- van actualizando un rumbo que creían inusual hace mucho tiempo.
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viernes, 27 de mayo de 2011

¿España, un cambio para que todo siga igual?

                                               

                                               Al Poder lo inquieta de verdad la gente  reclamando en la calle, sea donde sea. (22 mayo 2011)                                              

Luego de las primera cifras surgidas del conteo de votos en España hace unas horas, los diarios anunciaron un triunfo del Partido Popular con más de diez puntos de ventaja sobre el gobierno  y uno de los vicepresidentes de Zapatero  reconoció la derrota del socialismo en la elección, y casi de inmediato una vocera oficial agregó que esta no sería una buena noche  para ellos en el gobierno. Por supuesto, el partido ganador se siente fortalecido por el triunfo pero a primera vista,  cualquier cambio de mano en la gestión no augura de ninguna manera una mejora inmediata en la situación general de España. Las cartas están echadas sobre la realidad económica que no se cambia con discursos y en esta instancia, donde aún prevalece la sensación de bienestar casi absoluto sobre la gran mayoría del pueblo español, todas las recetas que arrimen los organismos financieros internacionales son de manual. Y quienes ya sufrieran sus recetas bien saben que ellas siempre apuntan a la reducción del gasto oficial incluyendo eliminar personal del sector público, ‘las prebendas sociales’ para los de más bajo recurso y ordenar según sus indicaciones,  las cuentas fiscales a niveles más operables. Con más tres o cuatro novedades particulares en cada caso y país que jamás frenan un aumento de la desocupación, - que se dice España anda por más del veinte por ciento y no desesperar si en USA de verdad ronda el diecisiete- lastimosa consecuencia que anuncia pobreza creciente y multiplicadora de la injusticia social en todos los casos. Ya dijimos, recetas conocidas como siniestras en estos pagos de la América Latina, lamentablemente.   .  

            La situación generada estos días en España y otros varios países de Europa son las consecuencias que sobre la población común suele ejercer el liberalismo en el manejo de la economía. Con criterios no pocas veces impiadosos, como aconteciera en la Argentina durante el año 2001 cuando este mismo mecanismo de asalto que la banca financiera hiciera sobre las ahorros bancarios y el consecuente ajuste sobre las cuentas del gobierno que han de sufrir España y otros países de la región por estos días, esa vez en nuestro país generó una inmediata ocupación de las calles exigiendo ‘que se vayan todos’, un reclamo que en menos de una semana significó no sólo la expulsión del gobierno de entonces, - con el presidente Fernando de la Rúa del partido Radical a su frente- sino una creciente actitud de participación del gentío en el ejercicio de sus derechos avasallados impunemente, como sucediera  al multiplicarse las espontáneas reuniones y movilizaciones que cambiaron todo el escenario político de entonces en el país. Naturalmente, no fue una movida con la profundidad que aconteciera en octubre de 1945 y el advenimiento político llamado peronismo, con la inmediata liberación psicológico del obrero ante el patrón; un hecho sociológicamente pocas veces repetido;  que entre los argentinos ya nadie discute y hace algunas semanas vinieron a explicarnos el español Savater y el peruano Vargas Llosa en la Feria del Libro de Buenos Aires;  cuando resultó claro que esos dos juntos poco sabían…

           Lo cierto es que no pocos medios en Argentina ya vislumbran con alguna  certeza que ese tipo de manifestaciones, - de manera especial y en los últimos días ocurridas en España-  vuelve a poner en la escena política un síntoma que se pudo apreciar en los recientes movimientos del mundo árabe. No iguales, por supuesto, pero poniendo sobre la escena inquietudes que subyacen y no desaparecen por represiones más o menos ni por generación espontánea, y acaso porque no se esclarecen de inmediato reviven a cierto subsuelo de cada sociedad humana en particular la espontaneidad por reunirse, algo que bien  pareciera ocultar cierto estallido posible en exponer una nueva interpretación de la realidad. Eso que el Poder tradicionalmente desconoce con al auxilio de ciertas capas beneficiadas con el privilegio, pero que de pronto emerge entre y la gente común se reencuentre en manifestaciones del estilo Puerta del Sol en España, que pequeño detalle sirve sin retorno para que todo el cuerpo social  perciba que algo ha cambiado en la manera de la participación. Un asunto que bien se sabe, jamás cuenta con la aprobación de los dueños del Poder en serio y que por estas días, se nos ocurre, con los resultados en contra del gobierno del PSOE y su líder Zapatero y a favor de Partido Popular, podría sugerir que algo cambie para que todo siga igual al menos por ahora. Porque los hechos históricos que vivimos día por día; con alguna guerra incluida por ahí cerca de Europa, dentro de su programa de sometimiento hay un hecho que al Poder lo inquieta de verdad: la gente defendiendo sus derechos en la calle y sea donde sea.
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Eduardo Pérsico nació en Banfield  y vive en Lanús, Buenos Aires, Argentina. (May/2011)